Hola!
Como ya
dije en el post anterior, prometí hablar de algo relacionado con mi shampoo y
también sobre mi desodorante.
Cuando
dejé de usar productos testeados en animales, lo primero que pensé fue
"Woo-hoo! ahora puedo vivir sin preocupaciones!" y la verdad es
que...ERROR!!!!!! Dejar de usar
productos que fueron probados en animales era solo la punta del iceberg.
Resulta ser que un par de días después de haber cambiado mi shampoo a uno de la
marca Ballerina (concretamente el de Quillay) empecé a sentir una picazón
espantosa en mi cuero cabelludo, me salió mucha caspa por la resequedad y no
podía pasar más de 2 días sin lavarme el pelo porque la picazón no me dejaba en
paz. Le comenté esto a mi mamá y ella me dijo que usaría mi shampoo para ver si
era solo una reacción alérgica mía (lo cual era bastante extraño pues hace un
año más menos había usado este mismo shampoo y no me había pasado nada). Al día
siguiente mi mamá me dijo que a ella también le empezó a picar el cuero
cabelludo y luego que pasó otro día, tenía el cabello reseco y con un poco de
caspa. Optamos por cambiar de shampoo y la picazón bajó considerablemente pero
la caspa y el cuero cabelludo reseco seguían ahí. Casualmente tomé la botella
del shampoo de Ballerina y me puse a leer todos los componentes que tenía,
entendí con suerte 1/4 de lo que salía en la etiqueta, donde todo estaba en
inglés y aunque lo tradujera automáticamente igual no entendía su función. Lo
mismo pasó con las otras botellas de shampoo que había en mi casa. Pero también
me llamó la atención que existían ingredientes que se repetían en todas las
etiquetas como el “Sodium Lauryl Sulfate”. Sin embargo lo que más me impactó
fue hallar Formaldehido entre los
ingredientes de un jabón de la marca “Nativa” con aroma a manzana, lo cual se
traduce como un químico clasificado como potencialmente carcinógeno cuando una
persona se expone por un tiempo suficientemente largo al producto y razón por
la cual los productos para hacer alisados con queratina, esmaltes de uñas,
tinturas, etc. ya no son elaborados con este compuesto altamente tóxico y
volátil. Quizás su concentración no era mucha en el envase de jabón líquido al
estar mezclado con otros ingredientes, pero no estaba dispuesta a arriesgarme.
Volviendo
al tema del shampoo, al cambiar nuevamente de shampoo, la picazón se fue pero
la caspa y la resequedad no. Pensé que era porque no estaba tomando suficiente
agua (como en ese tiempo verdaderamente tomaba muy poca) y aunque estuve un mes
tomando al menos 1 litro y medio a 2 litros de agua diariamente como es
recomendado, la caspa seguía. La respuesta de por qué esto seguía pasando se
presentó un día que me puse a buscar un brillo labial no testeado en animales
por internet. Una chica de un foro comentó acerca de lo quisquillosa que era al
elegir los productos que usaba para su pelo y maquillaje, sobre todo por los
químicos que estos contenían, los que llamaron más mi atención fueron el ya
nombrado Lauril Sulfato de Sodio, Lauril Eter Sulfato de Sodio, Triclosán,
Ftalatos, Parabenos y “Fragancia”, todos ellos presentes entre los diversos
cosméticos que yo tenía en mi casa.
Para que
no les suceda lo mismo que a mí, he aquí una recopilación de información
obtenida de la Environmental Working Group’s Skin Deep Database, donde se puede
buscar información sobre más de 70,000 ingredientes o productos cosméticos y de
la guía “Sense lloc on amagar-nos” (“Sin lugar para escondernos”) que aunque
está en catalán se entiende bastante pero quise adaptar gran parte de su contenido al
español.
Comencemos
con nuestra tabla periódica tóxica
Ftalatos
Almizcles Sintéticos
Los
almizcles nitrogenados y policíclicos son una serie de compuestos aromáticos de
estructura química similar que se usan como un sustituto de los almizcles
naturales. Los almizcles sintéticos son fragancias económicas y fáciles de
producir sin que afecten a los productos de uso personal y doméstico, como
detergentes para la ropa, geles de ducha, jabones, cremas de manos y perfumes.
Algunos almizcles también se utilizan en alimentación, ambientadores, tabaco de
mascar, cebos de pesca, inciensos y en productos técnicos como los preparados
herbicidas y explosivos.
El
problema con los ftalatos y almizcles sintéticos es que son contaminantes para
el medio ambiente y pueden acumularse. Muchos de ellos se degradan lentamente,
resultando en una exposición prolongada y crónica. Y lo que es peor, los efectos a largo plazo
son desconocidos, pero varios estudios e instituciones como Green Peace
sugieren que estas sustancias pueden resultar perjudiciales y que derivan en
problemas de salud y medioambiente. En este caso es mejor prevenir que
lamentar.
Dietanolamina (DEA)
Es un
detergente que se usa para otorgar texturas cremosas o espumantes y como
estabilizador del pH y por supuesto, con efectos cancerígenos demostrados.
Además de ser un residuo que contamina las aguas, es una amenaza para la vida
animal. Algunas variantes incluyen dietanolamina cocamida, dietanolamina de
aceite de coco, dietanolamina de laurilo, entre otros.
Polietilenglicol (PEG) y derivados
Son emulsionantes, productos que mezclan los
ingredientes grasos y el agua. Su problema es que dejan la piel más permeable y
permiten que ingresen al cuerpo otras sustancias químicas perjudiciales. Cabe
destacar que es son compuesto Etoxilado, es decir, creados utilizando Óxido de
Etileno, el cual es cancerígeno, siendo posible que pequeñas cantidades de este
compuesto queden en los productos cosméticos. También durante este proceso de Etoxilación, se crea un compuesto
orgánico conocido como 1,4-Dioxano que está catalogado como probable
cancerígeno humano y su uso aún no se
encuentra regulado en cosméticos provenientes de Estados Unidos y China.
Para
identificar el Polietilenglicol, si en la etiqueta de sus cosméticos aparece la
sigla PEG o esta misma más un número, por ejemplo PEG-150, es porque obviamente
está presente. El número adjunto se refiere a cuántas veces el Polietilenglicol ha sido tratado con Óxido
de Etileno (en medida de unidad química de moles).
Lauril Sulfato de Sodio (SLS)
Lauril
Eter Sulfato de Sodio (SLES, Sodium Lauryl Ether Sulfate)
Detergente
y surfactante considerado menos irritante que el Lauril Sulfato de Sodio. Su
diferencia radica en que el SLS no ha pasado por el proceso de Etoxilación (el
mismo empleado para el Polietilenglicol o PEG). Al ser el SLES procesado con el
Óxido de Etileno, este queda más suave pero contaminado con el 1,4-Dioxano.
Muchos productos para bebés contienen SLES al ser considerado menos irritante,
pero no se tiene en cuenta que los bebés y niños pequeños no tienen la misma
capacidad para eliminar toxinas como los adultos. Mucho cuidado!
Clorhexidina y Triclosán
Ácido Etilendiaminotetraacético (EDTA)
Su
problema es el daño ambiental. Se utiliza para eliminar metales pesados durante
el proceso de producción de jabones, favoreciendo que los metales más tóxicos
vayan a parar a las aguas y se depositen en el fondo de los cursos fluviales y
zonas costeras.
Fragancia o Perfume
A pesar de la apariencia inocente de estos dos
términos, tras ellos se esconden compuestos policíclicos de origen
petroquímico. Son reproducciones sintéticas de las fragancias naturales y que
ciertamente se han demostrado altamente alérgicas y cancerígenas. Se acumulan
en los tejidos adiposos y en la leche materna.
Algunas cosas que deben saber es que si los jabones
de colores y perfumados que no aclaran la procedencia de los extractos e
ingrediente que claman ser naturales, son verdaderamente sospechosos de
contener anilinas (colorantes) y fragancias sintéticas. Si las fragancias son
naturales, debería aparecer bajo el nombre de “aceite esencial”.
Por otra parte, el 95% de los productos químicos
empleados en las fragancias son compuestos sintéticos derivados del petróleo.
Un cosmético típico contiene entre 50 y 100 mezclas de fragancias, pero la
industria afirma que son muchos para ser citados fácilmente en la etiqueta de
los productos.
En algunos casos los fabricantes añaden la palabra
“natural” a las fragancias o perfumes y no justifican, argumentando que se
trata de imitaciones molecularmente exactas. Sin embargo, no explican que en su
elaboración sí emplean productos
derivados del petróleo que tienen efectos nocivos para el medio ambiente, entre
otras problemáticas.
DMDM Hidantoína
Es un conservante basado en Formaldehído, un
cancerígeno reconocido que en cantidades mínimas provoca irritación en las
mucosas, causando alergias y envejecimiento prematuro.
Goma Xantana o Xantano
Incrementa la viscosidad y textura cremosa de los
productos cosméticos líquidos, mayoritariamente los que se encuentran en forma
de Gel y en algunos productos comestibles; también se encarga de homogeneizar
la mezcla. Se elabora a partir de la fermentación de bacterias transgénicas, en
este caso la Xanthomonas campestris,
la cual es conocida por causar pestes en las plantas. Para evitar este
compuesto, es recomendado revisar la etiqueta antes de comprar el producto. Una
alternativa a la Goma Xantana es la Goma Guar y Goma Arábiga, polisacáridos
derivados de una leguminosa (Semilla de guar, Cyamopsis tetragonoloba) y de la resina de árboles subsaharianos
(Acacia) respectivamente.
Aceite mineral, Parafina, Petrolatum, Dimeticona, Cera micro-cristalina,
Siliconas
Son derivados del petróleo que cubren la piel con
una especie de película plástica, semi-permeable o impermeable, tapando los
poros e impidiendo la transpiración, lo que interfiere en el proceso de
eliminación de toxinas del cuerpo, pueden incluso promover la aparición de acné
y reacciones alérgicas. De algunas parafinas se sabe que se pueden almacenar en
el hígado, los riñones y ganglios linfáticos. Estas sustancias pueden, además,
estar asociadas a hidrocarburos aromáticos policíclicos almacenados en el
petróleo, carbón y depósitos de alquitrán, resultando altamente cancerígenos.
Parabenos (Metilparabeno, Etilparabeno, Butilparabeno, Propilparabeno,
Isobutilparabeno, Isopropilparabeno, Bencilparabeno).
Son compuestos
químicos utilizados habitualmente en la industria cosmética y farmacéutica,
actuando como conservantes de los productos. Sus compuestos y sus sales son
usados también como bactericidas y fungicidas. Pueden encontrarlos en shampoos,
cremas, geles, lubricantes sexuales, medicamentos tópicos, etc. Incluso son
usados como aditivos alimentarios. Entre los efectos que estos compuestos
pueden causar, podemos hallar que incrementan los niveles de estrógeno, imitan
las hormonas de tu cuerpo y pueden actuar como disruptores endócrinos cuando
son aplicados en el cuerpo. Una investigación realizada por la Universidad de
Reading, Inglaterra, mostró que los parabenos influyen en la formación de
tumores y cáncer de mama. En los desodorantes se considera especialmente
preocupante porque su aplicación es muy cercana a las glándulas mamarias. Para
empeorar las cosas, los parabenos no han sido prohibidos completamente porque
no se ha comprobado que estos químicos originen un cáncer directamente. Pero
como dije anteriormente, mejor prevenir que lamentar!
Clorhidratros, Sulfatos y otras Sales de Aluminio.
Estas sustancias bloquean las glándulas sudoríparas
y pueden causar eczemas y otros trastornos cutáneos. Además, sobrecargan la
concentración de Aluminio en el cuerpo, un metal que favorece la formación de
cáncer y enfermedades degenerativas del sistema nervioso, como el Alzheimer.
Con todo esto, la respuesta es más que clara:
SIEMPRE REVISAR LA ETIQUETA DE INGREDIENTES DE LAS COSAS QUE COMPRAS. Si
observas que hay componentes que no tienes ni idea qué son exactamente, es
mejor que tomes nota e investigues posteriormente y por supuesto, no compres
nada hasta que no estés completamente seguro/a de que no es perjudicial para tu
salud.
Otro tip con respecto al desodorante. Asegúrate de que sea desodorante y no antitranspirante,
porque como mencioné más atrás, estos impiden la sudoración y por ende la
liberación de las toxinas del cuerpo. Si sudas con esa fragancia que
caracteriza el ambiente del metro o la micro, con un desodorante basta para
quitar el olor. Y por supuesto, asegúrate de que no contenga Aluminio o alguno
de sus derivados (entiéndase como: dice “asnjdjsda-Aluminio”, no lo compro!).
La piedra de alumbre es conocida como una alternativa, pero se ha descubierto
que contiene trazas de aluminio. En mi caso, busqué recetas naturales de
desodorante en internet, por el momento estoy usando la alternativa del blog
LovingLife (click sobre el nombre para ver la receta). Si la primera semana
sientes que hay olor, no te preocupes, pregunté al respecto y supe finalmente
que eso ocurre porque el cuerpo se está habituando al cambio y liberando la
porquería de los desodorantes anteriores. Después de una semana
aproximadamente, se va todo olor y funciona de maravilla. De todas maneras
pienso en cambiar a otro tipo de desodorante cuando tenga plata (en Octubre XD)
así que posteriormente haré comentarios sobre mi experimentación ;)
Otro punto importante es: ¿Y qué uso ahora?
Si descubriste que tu shampoo, acondicionador, jabón, desodorante, maquillaje, etc. tiene varios de estos compuestos químicos y te diste cuenta de que casi todos los productos cosméticos que están en el comercio tienen los mismos ingredientes, la solución es buscar tiendas naturistas, herboristerías y farmacias como Baum y Knop, donde vendan productos artesanales e insumos para elaborar tu propio arsenal de cosméticos. Muchas de ellas venden por internet o bien realizan despachos a regiones ;) Pero lo más importante! asegúrate de ver los componentes que estos productos tienen, pues muchos comercios se jactan de ser 100% naturales pero al ver la etiqueta te das cuenta de que mienten descaradamente.
Más adelante continuaré con este tema e iré dando recetas que he encontrado en internet (porque obviamente tengo que probar que funcionen antes de ponerlas aquí)
Espero haya sido de ayuda c:
Hasta la próxima!
